colores de otoño

Un grupo de Liquidambares acompañados por unos olmos dorados (Ulmus montana aurea)

Estos días quiero que el tiempo se detenga y que la luz y los colores queden impregnados en mi retina para siempre. Miro para arriba y veo la luz filtrada entre las hojas de colores increíbles y miro para abajo después de la lluvia y veo las hojas estampadas en el piso y también me encanta. Y los colchones de hojas crujientes..? simplemente espectacular. 

Pero cuidado! a la hora de elegir aunque es una tentación comprar una planta de cada color, hay que pensar en la composición total para que todo forme un conjunto agradable no solamente en otoño, sino todo el año. Además a veces el exceso de color puede llegar a resultar empalagoso.

Los mejores efectos suelen lograrse combinando plantas de follaje caduco en este caso atractivas por el colorido otoñal sobre fondos verdes oscuros permanentes (como ser coníferas), donde éstas puedan apoyarse. La luz cambiante del día debe ser también aprovechada al máximo ubicando estas plantas en sectores donde el sol pueda atravesarlas y resaltar sus coloridos y brillos a contraluz.   

En esta foto en que  el color está dado por los frutos de los crataegus (Pyracantha coccinea),  quise mostrar como el fondo verde oscuro, en este caso de los Cupressocyparis leylandii, sirve de apoyo perfecto para el rojo complementario de los frutos.

Magnolia x´Loebneri Merril´

Hay muchas plantas como ser las magnolias caducas, que además de su floración espectacular a fines de invierno, ofrecen en el otoño unas tonalidades amarillas imponentes. 

Ejemplares de Liquidambar sturaciflua

El Liquidambar styraciflua es en Buenos Aires el rey del otoño. No hay quien no enmudezca ante sus vibrantes coloridos. Además posee la virtud de  conservar las hojas bastante tiempo con lo cual el disfrute es doble. En cuanto a su cultivo, es un árbol bastante fácil y poco exigente. Le gustan los suelos húmedos y ricos y mi recomendación especial es comprarlos de tamaño pequeño a mediano (no más de 2-3 metros como mucho) ya que el trasplante les cuesta un poco y se adaptan mucho mejor cuando son plantados jóvenes. 

Detalle de hojas de Liquidambar

Detalle de las hojas de Quercus palustris (roble de los pantanos), que suele confundirse con el liquidambar, y al contrario de éste último, resiste muy bien el trasplante, con lo cual pueden comprarse ejemplares de buen tamaño. Prefiere suelos húmedos y ricos.

Los tilos (Tilia europea)son árboles de porte espectacular. Su crecimiento es mediano, resisten el trasplante , y necesitan suelos muy bien drenados. En el verano el perfume de su flores inunda los jardines, en el otoño las hojas se ponen de un color amarillo espectacular y en el invierno su silueta es bastante prolija.   

Rhus typhina

Los Rhus typhina y R. succedanea, son pequeños arbolitos cuya única virtud es el color increíble de otoño. Y digo única virtud, ya que se trata de especies bastante toxicas, cuyos frutos y corteza pueden provocar irritaciones en la piel y estados alérgicos muy graves. Es por eso que no debe plantarse en lugares púbicos o en jardines donde los ñiños puedan tener acceso a ellos.

Acer palmatum a contraluz

El arce o acer  (Acer sp), es un género que agrupa muchos árboles de diferente porte y forma. Son especies que resisten muy bien el trasplante y de crecimiento fácil y mediano. Les gustan los suelos ricos, fértiles y bien drenados, especialmente a las variedades más delicadas como ser los Acer palmatum (en todas sus variedades), los Acer buergerianum y los Acer saccharinum. 

Paraíso (Melia azedarach)

Algunos árboles como el paraíso (Melia azedarach), usados generalmente en calles y avenidas en los campos, tiene follaje amarillo otoñal y luego sus frutitos color ocre quedan durante todo el invierno agregándole aún más valor ornamental. La floración en primavera es también uno de sus grandes atractivos.