Unos días de descanso y la oportunidad de disfrutar del "dramatismo invernal" en un lugar único. Me gustan todas las estaciones y en todas sus expresiones de la naturaleza. El invierno despojado, silencioso, frío de a ratos y un poco más cálido en otros momentos, especialmente cuando sale el sol y baña cada rincón iluminando lo que en verano queda oculto bajo los frondosos follajes.
Un mismo lugar, dos momentos del día y la luz que produce efectos mágicos en el paisaje.
Las cortaderas (Cortaderia sellowiana) y los cardos a contraluz con el sol haciendo brillar las espigas.
El agua quieta es un espejo perfecto para reflejar el paisaje que la rodea.
Un sauce mimbre (Salix vitellina aurea) destaca sus ramas amarillas sobre un grupo de pinos.
El bañado con totoras y juncos quemados y en el fondo un monte de sauces mimbres rojos (Salix vitellina var. chermesina) adelante, algunos álamos.
Papiros quemados (Cyperus papyrus), más juncos y ramas en el bañado, reducto de aves autóctonas.
Los álamos de copa en invierno dejan de ser un árbol común para cobrar protagonismo con su corteza y sus ramas grisáceas.
¡Qué hermosas imágenes! todas dan una gran serenidad. A pesar que a mí ¡no me gusta nada el invierno! sufro mucho el frío, estaría muy feliz viendo esos paisajes desde adentro de un lugar bien calentito y tomando ¿un chocolate quizás?.
ResponderEliminarDeseo que pases unos hermosos días de esas vacaciones tan merecidas. Cariños
Sigue siendo hermoso el paisaje hasta cuando la naturaleza lo desnuda ! Lorena .
ResponderEliminarQue hermosa foto junto a tu perro!!! Que lindo lugar!! Que sensación linda da el atardecer quieto, rojizo, silencioso...
ResponderEliminar...merecido descanso...